La Corte de Apelaciones de Puerto Montt, acogió un recurso de protección a favor de un bebé de 10 meses de edad y determinó que sus padres no pueden negarle las vacunas obligatorias del Ministerio de Salud, porque afecta su bienestar y derecho a la salud, además de poner en riesgo a la comunidad, informó este lunes diario El Llanquihue.
Esto luego que en junio de 2024, la Unidad Jurídica de la Dirección de Salud Municipal de Puerto Montt, representada por la abogada Soledad Cárdenas, interpusiera la acción legal, tras la recurrente negativa de los padres a cumplir con el calendario de vacunación.
En noviembre de 2023, el niño asistió a su control de salud infantil correspondiente a los dos meses, y en aquella ocasión ambos padres rechazaron la vacunación que correspondía a esa edad, no aplicando las vacunas hexavalente: primer refuerzo; neumocócica conjugada: primer refuerzo; y meningocócica recombinante: primer refuerzo.
Posteriormente, en enero de 2024, el padre del menor firmó el rechazó de vacunación esgrimiendo como motivo “por riesgo de efectos adversos en lactantes”, rechazando las siguientes vacunas: pentavalente: segunda dosis; neumocócica conjugada: segunda dosis; y meningocócica: segunda dosis.
Y en abril de 2024 la madre firmó rechazo de vacunación de su hijo, de la vacuna contra la influenza, siendo el motivo del rechazo “por reacción adversas, y por componentes que trae la vacuna”.
En ese contexto, el fallo del tribunal de alzada especifica que, si bien como regla las decisiones de salud recaen en los padres, existen casos excepcionales como cuando se pone en riesgo la salud del niño, como en este caso, al ser privado de la inmunidad que el plan de vacunación obligatorio aporta, actuando en contra de su interés superior, cuestión que justifica la intervención del aparato público.
Además, destaca que no hay evidencia científica que respalde los temores planteados por los padres sobre las vacunas.
Además, el director de Salud Municipal, Miguel Aravena, explicó que “obviamente es un tremendo riesgo para el pequeño no tener vacunas para enfermedades tan críticas como meningitis, neumonía o influenza. Los papás investigan en lugares que no son habilitados para dar información correcta frente a la vacunación, generando en ellos muchas dudas y desconfianza”.
Según contó Aravena, solo en 2024 se han efectuado diez medidas y recursos de protección, los que en su mayoría se han resuelto positivamente. Las medidas de protección son ordenadas por un Juzgado de Familia, mientras que los recursos de protección se presentan en la Corte de Apelaciones por vulneración a un derecho fundamental.
Soledad Cárdenas, abogada de Salud Municipal, confirmó que “nosotros durante este año hemos presentado aproximadamente diez medidas de protección, entre medidas y recursos de protección, en los que hemos solicitado la vacunación obligatoria de niños y niñas, y algunos adolescentes. Nos ha ido bastante bien en las medidas y en los recursos de protección. En casi todos los casos, son los papás quienes no han querido vacunar a sus hijos por ciertos temores y toda esta mala información que hay respecto a las vacunas”.
Aravena, en tanto, agregó que “todos los equipos están atentos a cualquier vulneración de derechos en el bienestar de los niños. Tenemos protocolos que todo el tiempo estamos mejorando. En estos casos, en general, recibimos primero la denuncia del equipo de salud del Cesfam donde se atiende el menor. Hay protocolos en los equipos que se activan de inmediato y una unidad jurídica que ve los temas”.
Sumado a la amplia dotación de vacunas que se aplican de manera gratuita en el sistema público, Aravena aseguró que “ha habido esfuerzos por mejorar las infraestructuras, el equipamiento, tener mejores refrigeradores, que todo cumpla con las normas, resultado de un esfuerzo coordinado entre los diversos centros asistenciales y autoridades de Salud”.
Sobre el proceso que se lleva a cabo después de recibir los fallos judiciales, Miguel Aravena detalló que “un equipo hace una visita domiciliaria para informar el fallo, y en general los padres acotan de inmediato y llevan a sus hijos a vacunarse a un recinto de Salud. De todas maneras, siempre se hace un seguimiento para que se cumpla con las medidas ordenadas”.
A la vez, la autoridad aclaró que, si bien, desafortunadamente, ha habido una tendencia a nivel mundial de no vacunar a los niños en los últimos años, “este siempre es un grupo minoritario”, y agregó que “lo más importante que la gente confíe en que las vacunas son seguras. Queremos transmitir esa confianza. Y que, como la Corte indica en este fallo, no hay evidencia científica de que las vacunas pongan en riesgo la salud de las personas”.